Quizá la palabra más correcta que deberíamos haber utilizado para el título es "culpa" o "responsabilidad" antes que "gobernante", pero de todas formas va a esclarecer una carencia constante en lo que de ahora en adelante será el registro de los hechos que acontecen en el departamento Valle Viejo.
Hemos visto muchas veces a personas que son excelentes y brillantes a la hora de poner excusas, no hacerse cargo, y no responsabilizarse de sus actos a pesar que aquello de lo que se excusan, vaya en contra de su beneficio propio. Podríamos agregar que ese tipo de personas siempre culpan o se hacen los desentendidos con tal de no responsabilizarse... ¿Manipulación? ¿Engaño?
Tal es el caso del casi ya mediático intendente Jalile que en los últimos tiempos sólo declara en pos de la provocación y la falta de paz, y no concilia ni siquiera su sueño.
Se lo ha escuchado hace muy poco en una reunión de padres provocar y descalificar - sí, algo totalmente suyo y como le es característico- a los docentes municipales como "una vergüenza", a la vez que manipulaba a los padres para que le destraben un conflicto que es totalmente de su responsabilidad como autoridad primera a cargo de la Municipalidad de Valle Viejo.
Expresó que tales docentes "son una vergüenza para el sistema”, y adelantó que "debemos corregir lo que está mal, tenemos que enderezar lo que está doblado”. Una estrategia de Jalile, que esquiva a lo vergonsozo que fue el aumento de su sueldo y el de sus funcionarios, que podría haber solucionado el conflicto docente pensando en la educación y la paz, pero no se refiere a eso en sus reuniones, claro está, conviene mejor culpar a otros u otras antes que responsabilizarse por lo que es de su competencia.
¿Creo escuelas municipales sin saber que no podía pagar?
En una de esas que ya tiene acostumbrados a todos los chacareros también a empleados y docentes, repitió: "todo, absolutamente todo, hasta los pocos pesos que entran por la tasa municipal se utilizan para pagar los sueldos y este no es el municipio que les dejamos. Desde el municipio les decimos que en nuestras escuelas las clases no se van a cortar más porque no hay otra forma de que los chicos aprendan. Pónganse del lado nuestro y no del gobierno (Provincial) que alimentó la joda en el departamento”.
De todo esto surgió el famoso y repetido también: "No hay plata".
Entre otras cosas, se refirió a la situación del municipio y expresó que "muchos docentes que veían que estaban pasando de 160 docentes a 400, de 2 mil alumnos solo llegaban a 1.400 algo estaba sucediendo. No es una cuestión caprichosa y se lo planteé al ministro de Educación, si nosotros cerramos a dónde van a ir los alumnos si el resto de las escuelas están saturadas. La provincia no nos dio nada, la coparticipación no está mejorando. Esta no es una cuestión caprichosa. No hay plata”.
Finalmente, Jalile reiteró que "con los recursos que hoy cuenta el municipio, los fondos de coparticipación, el Fondo Educativo, la ayuda de emergencia y lo que recauda el municipio por sus propios medios, solamente alcanza para pagar los sueldos. Y a los vecinos, ¿Qué les damos? también hay que atenderlos".
Por supuesto Jalile jamás tocó el asunto del por qué de los nuevos negocios de sus hijos "Don Vaca" que pertenece a su hijo Jair Jalile, tampoco habló, de su responsabilidad, porque, no hay peor gobernante que se desentiende de sus responsabilidades culpando a otro.
Reunión
El lunes pasado el Sindicato de Docentes de Catamarca (SIDCa) fue notificado por la Dirección de Inspección Laboral del llamado a conciliación obligatoria solicitada por el municipio de Valle Viejo.
Los docentes que se habían manifestado ese día frente al municipio realizando una clase abierta, volvieron a las aulas el martes una vez que conocieron oficialmente la instancia de conciliación. La primera reunión está prevista para el próximo miércoles 30 a partir de las 9.30.
El discurso de siempre y los agravios no paran
El intendente de Valle Viejo, Gustavo Jalile, tiene el discurso repetido que seguramente irá repitiendo durante toda su gestión hasta el hartazgo. Si bien reiteró lo que el mundo ya debe saber sobre la situación económica de la comuna, volvió a referirse a los docentes con agravios verbales.
En resumen:
Es repetitivo y hasta cansador las reiteraciones del intendente Gustavo Jalile sobre la situación económica de la comuna, del "desastre” que le dejó la gestión anterior, de que todos los recursos económicos son destinados para el pago de sueldos y que no hay una moneda más para garantizar los servicios, son los preferidos en su diccionario.
Pero el conflicto con los docentes municipales parece haberle colmado la paciencia a Jalile, que además de no haberse presentado frente a ellos en las diferentes reuniones (solo lo hizo una vez), ahora dice que son ellos los que se esconden.
Hizo mención a esto sosteniendo que los docentes municipales se habían comprometido a acompañarlo en las gestiones por la pelea de los fondos con el gobierno provincial. Se supo que en varias oportunidades el referente del SIDCa, Sergio Guillamondegui, se presentó varias veces y dialogó con autoridades de Educación y hasta Hacienda de la provincia buscando destrabar el conflicto.
Además de eso, algún tornillo está flojo, si se tiene en cuenta que quien no quiere ver ni en figurita a los docentes es el propio Jalile, quien manda a sus secuaces a las reuniones, mientras él prefiere hacer otras cosas, como por ejemplo, declaraciones que pocas soluciones traen.
Esta vez, el jefe comunal dijo que los docentes chacareros "son una vergüenza para el sistema”. ¿No se le habrá ido la mano? ¿Acaso quien reclama una mejora salarial es una vergüenza?
