El damnificado Leandro Basualdo se desempeñaba como empleado municipal en Valle Viejo, pero fue despedido por la gestión que conduce el intendente Gustavo “Gallo” Jalile.
“Me quede sin trabajo, y tengo una hija discapacitada la cual utiliza pañales continuos y hoy no los tuvo, ni tampoco los medicamentos”, señaló a los medios de prensa el ex empleado municipal.
Según relató: “Me llamaron el día sábado a las 7:00 de la mañana y en la Dirección de Personal me notificaron que estaba despedido, yo creo que es una cuestión política porque me nombraron en la gestión de Natalia Soria”, acusó Basualdo.
El caso de Basualdo se suma a tres más, donde empleados de la municipalidad de Valle Viejo han sido sumariados sin goce de haberes y posteriormente echados. Uno de ellos, de apellido Pintos, cumplía tareas en la finca perteneciente al intendente Jalile en Valle Viejo, era obligado por el jefe comunal a cumplir tareas como empleado privado, pero el sueldo que le pagaban, era nada más ni nada menos que el liquidado desde las arcas del municipio durante la gestión 2007-2011.
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